::
Somos en nuestro complemento. Piruí es hembra, y lo es aún más cuando sus finas y curvas líneas se mezclan con la masculinidad del Morsa.
No es la primera vez que femenino y masculino se inmiscuyen en el pleno sentido de la intimidad del juego, del barro, del secreto.
Piruí es, con el Morsa.
Desnudos en el barro, el sexo lleno de bichos
Placeres de Piruí, en la siesta del monte chaqueño
::
28 de octubre de 2010
Placeres de Piruí
::
Seguirla en el monte no es una tarea de espionaje, si ella me lleva en silencio, acarreandomé. Aquel bocado arenoso abrió la puerta de la sensibilidad hasta en el ser más infimo que trabajaba a nuestros pies. Fue una cadena de naturalezas, la marea del hongo y luego ser rama ser bicho ser pasto ser bosta ser árbol ser Piruí. A continuación, sus placeres monturnos.
Evidencias de que la respiración late y que la sed de barro existe
Rastros, algo hay
Seguirla en el monte no es una tarea de espionaje, si ella me lleva en silencio, acarreandomé. Aquel bocado arenoso abrió la puerta de la sensibilidad hasta en el ser más infimo que trabajaba a nuestros pies. Fue una cadena de naturalezas, la marea del hongo y luego ser rama ser bicho ser pasto ser bosta ser árbol ser Piruí. A continuación, sus placeres monturnos.
Evidencias de que la respiración late y que la sed de barro existe
Rastros, algo hay
25 de octubre de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)